Redes sociales y dominación masculina
Las masculinidades hegemónicas refuerzan sus mitos, leyendas, relatos del amor romántico, la mujer como posesión o la mujer como recompensa en las producciones fílmicas tipo Hollywood, los dibujos animados, la música comercial, los relatos de los videojuegos o el mundo de las redes sociales entre otros.
En la posmodernidad estos agentes de socialización tienen sin duda una gran importancia para la construcción de identidades clásicas por los modelos de identificación que se vehiculan en el contexto de dominio y subordinación.
Muchas de estas imágenes tienen en común el referente del modelo hegemónico de masculinidad: los actuales dibujos animados (por ejemplo la reciente Los Increíbles 2), o las nuevas músicas (Maluma, Bad Bunny, Enrique Iglesias…), los videojuegos (con el tóxico GTA como paradigma) o programas basura en horario prime time como First Dates, inciden en lo mismo.
Da la impresión de que poco se avanzó, un pesimismo nos invade, mientras los neomachismos se reproducen a pesar de todo, colándose por todos los poros de nuestras rutinas cotidianas. Nadie puede escapar de ello, ni tan siquiera en plan performático lanzando las televisiones por la ventana. El Gran Hermano visual posmoderno controla nuestros más mínimos movimientos de esta nueva «cultura afirmativa», de reconcialización y refinamiento del reclamo autoritario patriarcal.